CREMA DE MANZANA Y REMOLACHA

Esta es una crema fría, ideal para verano. Partimos de la receta clásica de una vichyssoise, pero en lugar de patata utilizaremos manzana. Aligeramos el plato y en frío está mucho más buena.

INGREDIENTES:

2 puerros o 1 puerro muy grueso

3 manzanas Golden

1 remolacha cocida (la podemos comprar así en los supermercados)

sal y pimienta

AOVE (Aceite de oliva virgen extra)

ELABORACIÓN:

Cortamos el puerro a rodajas, pelamos y troceamos las manzanas y estofamos los dos ingredientes juntos, con aceite de oliva, a fuego medio-bajo.

Cuando empiecen a estar tiernos (15 min aprox) cubrimos con un poco de agua y llevamos a ebullición unos diez minutos más. Salpimentamos y trituramos. Toda esta parte queda perfecta si utilizamos la Thermomix.

A continuación, separamos la mitad de la crema obtenida y dejamos la otra mitad dentro del vaso triturador. Ahí añadimos la la remolacha troceada y lo volvemos a triturar, todo junto. Así obtendremos dos cremas, una blanca y otra rosada.

Colocamos cada crema en una jarrita distinta y cogemos el recipiente en que lo vayamos a servir. En este caso, es bonito utilizar un vaso o copa transparente, para que se aprecien los dos colores.

Cogemos las dos jarritas, una en cada mano, y vamos vertiendo simultáneamente en la copa. Si vamos con cuidado, no llegarán a mezclarse las dos cremas, obteniendo el resultado que veis en la foto y que queda muy decorativo.

Reservamos en la nevera hasta el momento de servir.

Como guarnición, he laminado con mandolina un poco de manzana y la he colocado encima de cada crema. Estas láminas de manzana se pueden poner en crudo o bien secarlas en el horno un rato, para que estén más crujientes.

Observaréis que no he empleado ni nata líquida, ni mantequilla. Opcionalmente se lo podéis añadir, pero así ya queda cremosa y conseguimos un primer plato mucho más ligero.